Algunas veces... no logro entender lo que la gente quiere de mí...
¿Cómo empezar una entrada sin ser demasiado brusco ni conmigo mismo o con los demás? esta vez —como en muchas otras— no tengo respuesta alguna para esto. Como habrán notado, durante casi un mes, o diría que un poco más, estuve sin subir contenido alguno, y si dejaron de leer el espacio de lectura, no los culpo; sin embargo algunas veces es mejor dar un parón si no tienes motivo alguno para hacer lo que estás haciendo, o como es en mi caso, no tener las ideas claras para poner manos a la obra en alguna entrada, por muchas ganas que tenga por compartir lo que pienso y siento con el resto del mundo.
No obstante, creo es es un buen momento para retornar actividades que hacen de mi una persona más abierta pese al anonimato que se pueda tornar cada vez que escribo, aunque no es ningún secreto que las pocas personas que conocen este blog, saben perfectamente quién soy. Bien, dejémonos de dar explicaciones al aire y vayamos al grano: ¿por qué estoy aquí la noche de hoy en esta entrada? bueno... han pasado muchas cosas en el último mes, el de abril específicamente, pero... vamos por partes.
Bien, para inicios de abril, ser más específicos el primer martes del mismo mes, me vi con un viejo conocido que tenía ciertos problemas con su pareja —se peleaban, reconciliaban, expresaban cosas el uno del otro, etcétera— y pues decidí escucharlo y charlar con él para aconsejarle. El día transcurrió bien, no diría que de maravilla porque al final del mismo, bueno... comentarios bastante desagradables se hicieron presentes. No soy una persona que acostumbre a oír este tipo de comentarios pero, cuando un hombre dice que 'quiere utilizar MI HOGAR como sitio para marcar territorio' o 'demostrar qué tan hombre es', me repudian completamente, siendo alguien con el cual no tengo una ligera gota de confianza.
Por estos motivos, decidí alejarme nuevamente de las redes, pese a que tuviese solamente WhatsApp o mis espacios de lectura, no quería saber nada de nadie.
Pasaron los días y alrededor de mitad de mes, quise reabrir ambos espacios, el primero fue sencillo debido a que solamente era conectarme de nuevo a la red de WiFi, sin embargo lo segundo... no sentía las ganas que recorrían mi cuerpo por escribir algo y transmitirlo con las personas que me leen de vez en cuando. Simplemente no las sentía, quería tanto ponerme una noche y escribir y escribir y simplemente escribir y cuando ya estaba por mover mis manos sobre el teclado... ¡BOOM! las ganas de hacerlo se disipaban de una manera bestial.
Pasaron un par de días más, y una amiga muy querida de España me contactó, al parecer un poco preocupada al no saber de mí. Le dije que no debía preocuparse, pues no era nada más que un delirio existencial por el cual estaba pasando en ese momento y que solía pasar conmigo de vez en cuando. Compartió conmigo que esa misma semana partiría a Francia en una excursión, lo cual me alegró bastante leerlo, pese a que ella no tenía tanta ilusión de ir, sé que se divirtió y la pasó bien por lo que me comentaba cuando podía en cortos lapsos de tiempo que tenía y, me ofrecía.
Llegaría finales de abril, y bueno, ya sabía yo que algunas cosas no saldrían tan bien como otras. Mi amiga española tuvo problemas y se aisló, no la culpo, puesto que cuando muchas cosas carcomen tu cabeza simplemente lo único que quieres en ese momento es dejar que la situación pase y se resuelva, sean o no de la manera en la cuál tu quieres. Sin embargo, dejé en claro que pese a aislarse y sentirse sola, podía contar con mi apoyo porque a la final, es una chica bastante noble e importante para mi, y así mantengo firme mi palabra. También, otra persona querida que en su tiempo ella me quería a mí, dejó de hacerlo sin más y no me explicó el porqué, simplemente empezó a comportarse de manera fría, calculadora y un tanto seria, en verdad no creía que fuese a pasar alguna vez puesto que en algún momento me dijo 'cambiaría con muchas personas, menos contigo', pero como dicen por ahí: no debes creer todo lo que te dicen.
Pasaron un par de días más, y una amiga muy querida de España me contactó, al parecer un poco preocupada al no saber de mí. Le dije que no debía preocuparse, pues no era nada más que un delirio existencial por el cual estaba pasando en ese momento y que solía pasar conmigo de vez en cuando. Compartió conmigo que esa misma semana partiría a Francia en una excursión, lo cual me alegró bastante leerlo, pese a que ella no tenía tanta ilusión de ir, sé que se divirtió y la pasó bien por lo que me comentaba cuando podía en cortos lapsos de tiempo que tenía y, me ofrecía.
Llegaría finales de abril, y bueno, ya sabía yo que algunas cosas no saldrían tan bien como otras. Mi amiga española tuvo problemas y se aisló, no la culpo, puesto que cuando muchas cosas carcomen tu cabeza simplemente lo único que quieres en ese momento es dejar que la situación pase y se resuelva, sean o no de la manera en la cuál tu quieres. Sin embargo, dejé en claro que pese a aislarse y sentirse sola, podía contar con mi apoyo porque a la final, es una chica bastante noble e importante para mi, y así mantengo firme mi palabra. También, otra persona querida que en su tiempo ella me quería a mí, dejó de hacerlo sin más y no me explicó el porqué, simplemente empezó a comportarse de manera fría, calculadora y un tanto seria, en verdad no creía que fuese a pasar alguna vez puesto que en algún momento me dijo 'cambiaría con muchas personas, menos contigo', pero como dicen por ahí: no debes creer todo lo que te dicen.
Me volví viejo, pero no en el sentido de cumplir 40 u 80 años, pero sí en el de crecer. Tengo una idea en la cabeza para compartir lo que pienso al respecto en forma de poesía, si hoy o mañana lo tengo listo estará disponible en mi espacio de lectura en WattPad, en resumidas cuentas... no me gusta cómo estoy viviendo lo que llamamos 'crecer' o 'madurar', tampoco es que yo sea una persona completamente inmadura e infantil, pero siento que las cosas son muy extrañas y otras personas las ven común y corriente, como si fuese algo de su diario vivir. Quizá por ese pensamiento un tanto... curioso, es que a la final la gente que alguna vez estuvo a mi lado, simplemente dieron un paso a su derecha y siguieron su camino.
Por último... mi acceso a un instituto de aprendizaje. Recientemente he querido retomar mis estudios, pues extraño esa sensación de estar aprendiendo algo nuevo cada día y que el tiempo se pase lento por hacer bastantes cosas al mismo tiempo. Sin embargo... no he podido aplicar a los sitios en los cuales me gustaría verme, y eso realmente me preocupa bastante. Respeto a mis padres y todo lo que hacen por mi, pero... siento que no los merezco, ni a ellos ni nada de lo que tengo. No me considero una buena persona, tengo muchos errores, más de los que quisiera tener incluso, y me siento muy mal por ello. Intento no pensar en ello pero por mucho que me mato la cabeza, no lo consigo y simplemente... simplemente se me va de las manos y comienzo a desvariar.
Dejé en claro a mis padres que, sino resultaba alguna de las ideas que tengo en mente para los próximos días, pondría manos a la obra a trabajar, sin descanso alguno y, posiblemente, me iría de la casa o pagaría mensualmente mi alquiler de mi propia habitación, pese a ellos ser los dueños. Me siento una persona completamente inútil, que no tiene motivos y todas estas cosas quisiera reafirmarlas conmigo mismo en un espacio en el que esté vacío y con una mente totalmente en blanco, no quiero perder más el tiempo y es algo que me anhelo proponerme, y realmente... no quiero volver a tener el tipo de pensamientos que tenía hace unos cuantos meses, y siento qué de alguna u otra manera, están regresando y que además, me hacen ver que irse y dejarlo todo puede ser la solución correcta.
Bueno, creo que he liberado bastante de lo que sentía y pensaba, pronto más mediante poesía o en entradas directas. Mientras tanto, disfruten hoy de dos canciones, de mis favoritas recientemente.
Un abrazo a todos los lectores que se toman el tiempo de leerme.
Comentarios
Publicar un comentario